martes, 17 de noviembre de 2015

Relanzamiento en las relaciones diplomáticas entre México y Cuba, y su contexto internacional.




Por Héctor Alfonso Rodríguez Aguilar

En los últimos sexenios del gobierno mexicano la relación diplomática entre Cuba y México han sido mala, sin embargo hoy la actual administración de Enrique Peña Nieto ha pensado un relanzamiento de relaciones entre ambos países.

La visita de Raúl a Mérida, Yucatán, se dió los días 6 y 7 de noviembre del año en curso, como un gesto del mandatario cubano de subsanar diferencias entre ambas naciones, y buscar mutuos acuerdos que beneficien a las dos naciones.

Desde el gobierno de Ernesto Zedillo Ponce de León, tuvo una hostil y diferente postura con el líder histórico de la Revolución Cubana Fidel Castro Ruz, con la frase de Zedillo con respecto a: “No merece México que sea tratado por  Fidel así como lo hace”, sintetiza el choque y el enfrentamiento en que tuvieron ambos gobiernos. 

Luego vino aquel exabrupto del presidente botudo Vicente Fox Quezada, que cuando hubo una importante cumbre de las Américas en la norteña ciudad mexicana de Monterrey, al estar en desacuerdo la presencia del líder cubano por parte del belicista George Bush, el anfitrión Fox le dijo a Fidel: “Comes y te vas”.

Luego vino Felipe Calderón Hinojosa que quiso tender un nuevo puente de relaciones diplomáticas, pero la ideología neoliberal y conservadora de Calderón contraria a Hugo Chávez presidente de Venezuela y uno de los aliados de La Habana hizo que no se concretara ese fin.

Desde luego que históricamente sabemos que Fidel organizó, planeó y ejecutó parte de su revolución cubana en la capital de la república mexicana, zarpó en el yate del Gramna de Tuxpán, Veracruz en el Golfo de México rumbo a la isla para iniciar la lucha armada.

Uno de los políticos mexicanos que siempre vio con buenos ojos ese hecho fue, el general Lázaro Cárdenas del Río. Dado que fue un político expresidente mexicano con una ideología de izquierda que comulgó con las aspiraciones de esos jóvenes rebeldes cubanos.

Siempre Fidel le agradeció ese gesto solidario a Lázaro Cárdenas, y en lo sucesivo tuvo una muy buena relación con los gobiernos mexicanos. A pesar de la ruptura de relaciones diplomáticas que se dio en los tempranos años de la revolución con Estados Unidos (USA), la nación azteca nunca rompió relaciones con el gobierno revolucionario de la mayor de las Antillas.

Recientemente en que Estados Unidos y Cuba, han vuelto a tener relaciones diplomáticas, ha nacido una nueva etapa de entendimiento entre ambas naciones. A pesar de la Guerra Fría que fueron de mutua acusación y de hostiles acciones para ambas naciones, todo eso a pesar de la caída de la Unión Soviética, donde se dio un cambio en la mayoría de las naciones socialistas del mundo. Cuba en una especie de letargo político, siguió con su mismo régimen político socialista.

Con la invitación de Peña Nieto a Rául Castro Ruz para visitar la península de Yucatán, se convierte en la primera visita de dicho mandatario cubano a nuestro país como jefe de estado. Las relaciones entre ambos países datan desde hace 113 años.

Se da este relanzamiento de relaciones, en el pasado muy amistosas, hoy de muy poca importancia dicha relación, dado que la relación de Cuba con México ha perdido importancia, por la línea política neoliberal que han seguido los últimos gobiernos mexicanos. Que han dado la espalda a Latinoamérica y ha vuelto la vista a sus socios de Norteamérica (Canadá y USA). Hoy con el contexto del descongelamiento  en la relación USA-Cuba. Se da esta búsqueda de una nueva etapa, dado que hasta ahora México no ha sabido reacomodar la relación con la mayor de las Antillas.

La relación Cuba-México ha perdido fuerza, y existe cautela entre ambos gobiernos. Mientras el discurso y las acciones políticas de México en relación a la isla cubana ha sido de retórica. Canadá otro de los gigantes de Norteamérica, ha tendido una relación de colaboración estrecha con la isla. La nación de la hoja de maple, invirtió en Cuba en la minería en concreto en la explotación del Nickel, también invirtió en el petróleo, electricidad y turismo. Ha sido una relación que pasa por el aspecto económico, por el  pragmatismo.

Hoy por ejemplo la relación Cuba-Estados Unidos pasa más por la economía que en el aspecto ideológico. USA busca una relación parecida a la que lleva con otro país socialista como lo es Vietnam, que hoy es socio de Estados Unidos. Existe una expectativa por parte de La Habana en relación con la cuestión de Latinoamericana, de no quedar relegada, y que sus antiguos socios políticos puedan invertir como es el caso de Brasil que asume una fuerte inversión en la adecuación del Puerto de Mariel.

El relanzamiento de relaciones México-Cuba, es la oportunidad de México que no puede perder, para invertir en la isla. La creación de proyectos productivos y de inversión, es la línea a seguir. Serán 30 nuevos proyectos de inversionistas mexicanos que harán para Cuba. También al mandatario cubano Raúl Castro le interesa que se pueda dar una mesa trilateral entre USA-Cuba y México por la explotación del petróleo en el Golfo de México. 
  
Pero para que todo salga a pedir de boca para USA, el gobierno revolucionario de Cuba debe ir cambiando su sistema político económico en su conjunto. Eso le ayudará a tener un acomodo en el concierto de las naciones.
Héctor Alfonso Rodríguez Aguilar Web Developer